Autor: Elisabet Roig. Documentalista de Derecho.com
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Lejos de ser un sector en crisis, la venta de vehículos de segunda mano ha aumentado durante los últimos años. A la espera de nuevos datos, según el último estudio realizado por el Instituto de Estudios de Automoción (IEA) para la Federación de Asociaciones de concesionarios de la Automoción (FACONAUTO), en 2013 las ventas de coches de ocasión subieron un 4,6% respecto 2012.
Adquirir un coche de segunda mano puede ser una buena opción para aquellos conductores que no pueden permitirse comprar un vehículo nuevo. Sin embargo, hay algunos aspectos importantes que deben ser considerados antes de hacer cualquier compra.
¿El coche que voy a comprar está libre de cargas?
El primer paso a tener en cuenta es averiguar si el vehículo que se quiere comprar tiene algún tipo de cargas o si ha pasado correctamente todas las revisiones oportunas. Aunque el vendedor sea una persona de confianza es importante cerciorarse de que el vehículo está totalmente al día en cuanto a pagos y revisiones ITV. Toda esta información viene recogida en un
informe de matrícula de la DGT, que es un documento emitido por la Dirección General de Tráfico, ofrece la información básica del vehículo:
las características técnicas, el número de dueños que ha tenido, si ha pasado correctamente las revisiones ITV, si tiene algún embargo o precinto…
Actualmente se puede obtener fácilmente el informe de matrícula de la DGT a través de internet.
Firma del contrato de compraventa del vehículo
Una vez comprobada la situación jurídica y administrativa del automóvil con el informe de matrícula de la DGT, ya se puede realizar la compra en sí misma firmando un contrato de compraventa del vehículo donde quedan claras las condiciones de pago y el precio del coche.
Después de la firma del contrato hay que pagar el Impuesto de Transacciones Patrimoniales. Normalmente (ITP) este impuesto suele ser entre el 4% y el 6% del valor total del automóvil que constan en las tablas que tiene Hacienda.
Una vez pagado este impuesto, ya se puede formalizar el pago del vehículo. Es recomendable pagar antes el ITP que el vehículo pero puede hacerse al revés.
Cambiar el nombre del titular del vehículo
El último paso antes de disponer completamente del vehículo es acudir a una oficina de Tráfico para formalizar el cambio de titular. Hay que presentar el contrato de compraventa del vehículo, los comprobantes de la ITV y el carnet de conducir. Después de pagar las tasas correspondientes, el nuevo dueño del vehículo obtendrá una nueva tarjeta de circulación del coche a su nombre.
A partir de este momento, el comprador ya es el dueño del vehículo a todos los efectos y ya puede empezar los trámites para asegurarlo.
En resumen, para evitar sorpresas desagradables, el paso más importante antes de adquirir un vehículo de segunda mano es conocer cuál es la situación administrativa y jurídica del mismo. A través de un informe de matrícula de la DGT conoceremos de primera mano esta información.
Puede solicitar ahora mismo este documento oficial a través de internet y, en el mismo día si lo desea, recibirá en su correo electrónico el informe de matrícula de la DGT.
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